La Gripe Porcina y La Huachafada Peruana

Aunque la mal llamada "gripe porcina" ha acaparado la atención mundial, despojando de la palestra pública la no menos preocupante crisis económica, esta situación pone en evidencia el punto frágil de todos los actores de esta novela mediática. La psicosis generada por el virus H1N1 al menos en nuestra capital, ha significado la comidilla diaria de los medios de comunicación sensacionalistas , quienes han encontrado en esta un estupendo recurso para incrementar las ventas de sus monótonos y aburridos diarios. Por otro lado, la población que en un primer momento ignoraba siquiera de la existencia de este virus, empezaba a mitificar sus efectos y modo de transmisión, a tal punto que la carne de cerdo terminó por saldar los platos rotos y las mascarillas agotadas de los escaparates de las farmacias daban inicio al ridículo desmadre psicótico.
Sin menospreciar el impacto del virus en materia de salubridad pública, y las consecuencias que este genere, lo cierto es que en el Perú, existen desde antaño enfermedades infectocontagiosas que no generan titulares y que sin embargo cobran la vida de miles de personas anualmente.

Es sorprendente revisar algunos datos del MINSA que datan del año 2001, en donde increíblemente se tiene registros que en el Perú mueren 195 personas semanales por "Gripe" ¿Quién hace noticia de ello? . La gripe porcina tiene una letalidad del 5%, debemos tomar las cosas en su real dimensión, con prudencia y alerta, pues este es un virus nuevo y aún no se conoce su peligrosidad. Al consultarle al doctor Elmer Huerta sobre la actitud alharacosa de la gente, bien me dijo : ...el ser humano le tiene más miedo a lo desconocido.